No es un secreto, es una realidad la necesidad de estar preparados para la gran competencia de los mercados mundiales, ya no más medianos esfuerzos, los tiempos cambian a gran velocidad y no queda más sino enfrentar decididamente los requerimientos de la demanda de productos o servicios a través de la planificación de estrategias que nos permitan la participación y porque no, el control de un mercado específico. Se tiene conciencia que los ingresos se obtienen en base a la productividad de una empresa, de allí que para causar esta rentabilidad se debe establecer un programa integral para el mejoramiento no solo del recurso humano, si no también de los recursos físicos como: las máquinas, los equipos y por supuesto el medio ambiente.